Os pongo en antecedentes. Ni idea de que hacer para cenar, para variar, claro. Decido ir al Mercadona cuando Gorka sale a las 5 del cole a ver si me llega la inspiración divina y se me ocurre algo y sino, a las malas, tirar de unas hamburguesas. No, no, no, no... arghhhhhh no llega esa revelación... y de repente una vocecita... - Mamaaa compra eso!!!! - Carne picada?? - Siii, para hacer pinchitos!
Mmmm parece que esta vez la revelación ha sido para Gorka. Pues venga, la cogemos y con una ensaladita, ya esta la cena lista. (Por cierto, los pinchitos a los que se refería son las keftas árabes).
Llego a casa, lo ducho, me siento delante del ordenador... a mi no me convence la idea de volver a hacer las keftas. Si hace nada que las hice! Blog por aquí, blog por allá, google y demás, y al final, improvisación con varias ideas de los blogs y de google.
Ingredientes:
- 1/2 kg de carne picada (la mía era mezcla de cerdo y ternera)
- 1 cebolla
- 1 bote de setas
- bechamel
- Puré de patatas
- Queso rallado
Preparación:
Picamos la cebolla muy fina y la ponemos a pochar. Cuando esté hecha, añadimos la carne picada, salamos y la vamos moviendo. Cuando esté casi hecha, le agregamos las setas escurridas. Y dejamos que se mezclen los sabores en el fuego durante unos minutos, mientras hacemos el puré de patatas (sea de sobre o casero) y la bechamel (lo mismo).
Echamos un poco de bechamel sobre la carne y las setas para que liguen mejor.
En una bandeja de horno ponemos el puré de patatas de fondo, encima la carne con las setas y por último la bechamel. Le echamos el queso rallado por encima y lo gratinamos hasta que coja el color doradito.
Notas:
Evidentemente podéis coger la carne que queráis. A mi me gusta la mezcla de ternera y cerdo porque encuentro que queda más jugosa.
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