Ayer fue San Alberto el Grande, y como tengo mi particular "Alberto el grande" (pero por otro motivo, jeje), decidí hacerle un bizcocho para felicitarlo. Después de estar toda la mañana buscando, y también parte de la tarde, al final me decidí por este. Para mi gusto le falta un poquito de azúcar y no es un bizcocho tan suave como el de yogur, pero queda ideal para el desayuno, mojándolo en la leche. Además huele idéntico a los sobaos que podemos comprar en cualquier supermercado.
Ah! por cierto, la receta original es del blog de Karolina, "Fuchicando en mi cocina", aunque yo le he hecho algunas modificaciones, no se si muy acertadas.
Ingredientes:
- 2 cucharadas de queso mascarpone (Karolina puso Philadelphia)
- 3 huevos (ella 2)
- 190g de leche condensada
- 180g de harina de repostería (Karol un vaso, que pesado son unos 115g)
- 1 sobre de levadura (ella medio)
- 62g de mantequilla
Preparación:
Batimos con las varillas, la leche condensada, el queso y la mantequilla derretida. A continuación batimos con las varillas los huevos y vamos echándolos poco a poco a la mezcla de leche condensada, batiendo con las varillas.
Mezclamos la harina con la levadura y las tamizamos encima de la mezcla anterior. Vamos uniendo la harina con la mezcla mediante movimientos envolventes con una lengua o una espátula.
Preparamos un molde con papel de horno o simplemente engrasándolo para que no se pegue el bizcocho. Echamos la masa y lo metemos al horno previamente calentado a 170º.
En unos 45 minutos estará listo, para saberlo, ya sabéis que hay que pinchar con un palillo y si sale limpio, ya está hecho.
Podéis decorarlo con azúcar glacé, espolvoreando con cacao o con una cobertura de chocolate.
Notas:
Como ya os he dicho, es ideal para comerlo a la hora del desayuno, como prueba del delito de esta mañana...
que mano tienes para los bizcochos hija...
ResponderEliminarme tendras que dar una master class...
eso...o tiro el horno...una de dos...ja.ja
petonets
Patri ya sabes que cuando quieras nos juntamos y hacemos tooodos los bizcochos que quieras, pero yo me jugaría algo a que la culpa es del horno. Una mamá del cole de Gorka también decía siempre que se le bajaban los bizcochos, al final, hace un par de semanas fui a su casa y hicimos uno. Todo iba bien... hasta que dejó. De repente el centro del bizcocho se hundió como el Titanic, y tuvimos que cortarlo ya hacer como un rosco. Me dió la sensación de que el horno alcanzaba un temperatura máxima y luego bajaba en picado, y claro el bizcocho hacía lo mismo. Por lo menos ella se quedó más tranquila de que no es su culpa, jajaja.
ResponderEliminarPetons!!!
Acabo de descubrir tu blog y me parece muy bueno ..me hago tu seguidora ...
ResponderEliminarEste bizcocho lo he visto en varios blog pero aún no me he puesto manos a la obra ...algún dia será.
Marian, bienvenida! y gracias!
ResponderEliminarEl bizcocho te lo recomiendo para desayunar. Eso si hay que gastarlo rápido, porque en seguida se pone malo.