Esta es la única carne que no me gusta. No puedo con el conejo!!!. Pero como en casa le gusta a mi marido y también a Gorka, de vez en cuando les hago para que no digan que sólo cocino lo que me gusta a mi. El caso es que la salsa estaba super buena pero claro, sólo la probé con el dedito por no comer ni un trocito de conejo...Menos mal que los otros dos se chuparon los dedos!!!
Ingredientes:
- 1 conejo
- 1 cebolla
- Vino tinto
- Una mezcla de chocolate y mermelada de naranja
Preparación:
Limpiamos el conejo y lo salpimentamos.
Cortamos la cebolla en juliana.
Ponemos el conejo a freír en una sopera con poco aceite, cuando tiene cerrado el poro le añadimos la cebolla. Esperamos a que esté hecha y le añadimos un vaso de vino tinto y una buena cucharada de la mezcla de chocolate y mermelada de naranja. Rectificamos de sal. Dejamos unos 20 minutos a fuego lento, y ya podemos servir.
Para la mezcla necesitamos: chocolate negro de postres, mantequilla, un chorrito de nata y mermelada de naranja. Ponemos a deshacer el chocolate con el chorrito de nata y la mantequilla, cuando esté líquido le añadimos la mermelada de naranja al gusto.
Notas:
La mezcla la había hecho para rellenar un bizcocho y me había sobrado, así que como el chocolate potencia los demás sabores me decidí a echarlo en la salsa y la verdad es que mereció la pena porque a mi marido le encantó.
La mermelada de naranja era dulce, pero también podéis encontrarla de naranja amarga.
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