No se si os he comentado alguna vez que soy de la página Treemkt. En esta página, podéis participar en la prueba de productos de todo tipo, para luego comentar que os parece y qué han pensado los amigos a los que les habéis dado muestras.
En esta ocasión, estoy participando en la prueba de Maggie Directo al horno. De ahí la primera fotografía. El resultado nos gustó mucho, sobretodo a mi hijo, que desde entonces no para de pedirme el pollo aquel de la bolsa.
Pero no contenta del todo, porque me parecía demasiado sencillo lo de seguir las instrucciones al pie de la letra, me decidí a hacer algún mini experimento. Y si, mini, porque tampoco era cuestión de quedarnos sin comida!!!
Ingredientes:
- Chuletas de cerdo
- Patatas
- 1 bolsa de Maggie directo al horno (en este caso la de pollo)
- Aceite, sal
Pelamos y cortamos a gajos las patatas. Las metemos en la bolsa que nos proporciona Maggie Directo al Horno y añadimos un poquito de sal.
Echamos parte del condimento dentro de la bolsa junto a las patatas, reservando bastante para las chuletas.
Mezclamos bien las patatas para "se pinten" todas, cerramos la bolsa, le hacemos unos cortecitos diminutos, y la metemos en el microondas unos 6 minutos a máxima potencia.
Mientras se hacen las patatas, untamos las chuletas con el condimento que nos ha quedado. No hace falta que les echéis sal.
Ponemos la plancha al fuego y vamos haciendo las chuletas a la vez que en una sartén con aceite, freímos las patatas recién salidas del microondas para que queden ligeramente crujientes.
Montamos el plato y servimos calentito.
Soy bastante escéptica con todo este tipo de productos. Algunas me conocéis lo suficiente para saber que me gusta hacer todo en casa y que no suelo coger atajos para hacer la comida. Pero esta vez Maggie me ha convencido. Es rápido, fácil, limpio y está muy bueno. Os lo recomiendo!
Ah! y que os voy a decir del plato-mini experimento, las chuletas estaban buenas, pero las patatas eran un pecado!!!
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